Trastorno de aprendizaje,
una oportunidad de conocerse
La creciente preocupación porque exista un trastorno de aprendizaje ante un ritmo “inadecuado” en el progreso curricular o ante una emoción negativa relacionada con la escuela, ha promovido un avance en el estudio de problemas específicos del aprendizaje y, paralelamente, ha impulsado un cuestionamiento crítico de los planes educativos actuales.
Desde una visión holística de acompañamiento en los procesos vitales de las personas, consideramos que una dificultad, un trastorno, un malestar…puede ser redirigido hacia un aprendizaje profundo de crecimiento humano.Una oportunidad de conocer y conocerse.
Es desde esta perspectiva que nace el Programa de atención y mejora en los procesos de aprendizaje (PAMPA), porque más que aprendices, somos seres “aprehendientes”, una palabra que no existe en nuestro vocabulario, pero que pretende transmitir la capacidad de estar en constante aprendizaje y transformación.Tomar consciencia de ello nos empodera para lo que nos depare el futuro.
Porque, tengamos claro que respecto a nuestros hijos, más allá del sistema educativo principal de la sociedad o las tendencias alternativas, de la elección de la escuela ideal, del encuentro con la maestra o maestro capaz, de los recursos que se dispongan, de las ayudas externas, de la voluntad de atender la diversidad,de los diagnósticos exactos…existen unos seres que han venido a este mundo a dar lo mejor de sí…
Y, una dificultad en los aprendizajes escolares nos puede dar pistas de ese singular talento.
LA CONSULTA SOBRE EDU
Recibo una consulta telefónica sobre el servicio PAMPA pidiendo información para ayudar a un niño, Edu de 8 años,que “no avanza en el colegio”, dice su mamá Carmen. Ha visto que en el centro tenemos el método Tomatis® y cree que le puede ir bien.
Le explico que, por supuesto, la neuroestimulación auditiva que estimula la plasticidad cerebral y la capacidad de escucha, principios de actuación del método Tomatis®, es una herramienta muy útil que utilizamos dentro del programa. Pero que también abordamos de forma más amplia aspectos que esta situación parece llamar la atención.
En un primer encuentro viene Carmen sola a realizar una primera visita y poder hablar de sus preocupaciones con la libertad de hacerlo sin su hijo delante.
Tomando como herramienta guía el modelo del trébol de cuatro hojas, vamos analizando los aspectos que configuran el ser humano, el cuerpo físico,el cuerpo vital, el campo emocional y la esencia o identidad.
Para Carmen lo más destacado es que “no aprende por más que le repitas las cosas”, es un niño con poco carácter y los compañeros lo dominan, va a disgusto al colegio desde hace dos años, y aunque coincide con el nacimiento de su hermana, ella lo atribuye a que en el colegio empezaban con la lectura más seriamente.
Se queda a comer en el colegio porque en casa es “mal comedor”. A las 16:30h lo recoge y van a casa de la abuela a hacer tiempo para ir a buscar a la hermana a la guardería.
El padre llega sobre las 18:30h. y mientras él baña a la niña, a ella le toca “la hora del suplicio” con los deberes de Edu. No hay manera que acabe con la tarea, todo se eterniza y es una batalla diaria.
Se muestra muy angustiada porque cree que su hijo puede tener algún trastorno, él no quiere leer y escribe con muy mala letra.
Fue un niño muy deseado, le costó mucho quedarse embarazada y tuvo que hacer reposo durante la gestación.
Ante la pregunta de qué es lo destacable en positivo de Edu, dice reconocer que aunque le comenté por teléfono que lo pensara, cuando ha intentado ponerse a ello, sólo le viene a la cabeza el miedo a que tenga algún problema que no le permita ser un niño capaz.
Hacemos un pequeño ejercicio de relajación/ conexión con los sonidos vocales y le invito a que lo haga cada día antes de ir a dormir y que piense entonces lo destacable en positivo de Edu.
EDU VIENE A LA CONSULTA
A la semana tenemos la siguiente sesión, esta vez ya con el protagonista. Edu es un niño menudo que se muestra tímido,buscando el contacto continuo con la madre. Poco a poco se va hacia el lugar de juegos y empieza a jugar con piezas de encaje, con cuerdas y colores.
Mientras observo su psicomotricidad,la madre me dice haber hecho la práctica que le recomendé y que Edu es un niño muy cariñoso con su hermanita, que le gusta cantarle y a ella parece encantarle.
Su lateralidad predominante es izquierda en mano, ojo y pie. Después, en sesiones posteriores al realizarle un Test de Escucha, se comprobó que en oído también.
No es un niño hablador, pero pide aquello que necesita o le interesa y empezamos una conversación. Explica que en el colegio juega al futbol con los amigos aunque a él no le gusta mucho. A él le gusta jugar con su prima, que es más pequeña, a cantar y a disfrazarse.
Su madre ha traído la libreta de los deberes “extra” que ella le pone para mostrarme la mala letra que hace. Invito a Edu a que pinte, dibuje o escriba lo que quiera en su libreta.Y Edu rellena hasta ocho páginas seguidas de garabatos de color negro. Empieza con mucho ímpetu y poco a poco se va relajando…
Tranquilizo a Carmen para que le deje hacer. Ella va diciéndome que nunca había hecho algo así.
Cuando acaba, escribe su nombre bien grande: EDU. Y acto seguido me pregunta: ¿podía hacerlo? Le contesto que de eso se trataba, de pintar, dibujar o escribir lo que quisiera en su libreta. Sonríe, se sienta en las faldas de mamá y le da un beso.
INICIAMOS UN ACOMPAÑAMIENTO EN ESTE PROCESO
Junto a Carmen, determinamos que antes de descartar o confirmar algún problema de aprendizaje, hay que atender el campo emocional para que Edu reconecte con el deseo de aprender y que ambos puedan disfrutar de esos ratos compartidos.
Edu disfruta de una hora semanal de escucha de música filtrada, mientras juega, dibuja, pinta o escribe alguna canción. El programa seleccionado para él, del
Método Tomatis®, actúa sobre el sistema límbico (parte media del cerebro) al que el sistema auditivo está conectado. Esta parte es, entre otras cosas, responsable de los mecanismos de la emoción, la memoria y el aprendizaje.
Carmen y yo observamos y proponemos nuevas prácticas para entrenar en casa. Por ejemplo, Edu es el nuevo ayudante de cocina de los domingos. De esta forma el vínculo relacional de ambos no se limita a los aprendizajes escolares, sino a otros aprendizajes más cotidianos y asimismo ha empezado a explorar el placer de comer aquello en el que él ha participado. Si algún día la opción de quedarse al comedor del colegio se desvincula del ser “mal comedor” habrá sido un éxito, pero eso ya se verá…
También vamos a ir descubriendo ese potencial que parece asomarse al gusto por el canto y la interpretación.
Carmen, por su parte, ha empezado un trabajo sistémico en el centro, ya que en una sesión conectó su miedo a que a Edu le pasara algo malo, con la muerte de su hermano pequeño, cuando era una niña. Se ha abierto un espacio para conocerse.
Vamos caminando hacia un lugar que no sabemos dónde conducirá pero que está proporcionando serenidad en este transitar. Y, de eso se trata.
De ROSA CHACÓN,
MAESTRA Y MEDIADORA