HOMEOPATIA E INMUNIDAD ALTERADA

Adolescencia con cansancio, dolores de cabeza, diarreas, sobreinfecciones…expresión de un sistema inmunitario alterado.

Miriam tiene 18 años y es una adolescente  alta y delgada. Lleva tiempo muy cansada, apática, desanimada; está estudiando bachillerato y este año tendrá la selectividad. Le cuesta mucho estudiar por falta de memoria. Ella no era así. También tiene dolores de cabeza  frecuentes, como un peso encima de la cabeza, que le empeoran con la luz (no puede trabajar con el ordenador) y le molestan también los ruidos o la música. Hace tiempo que se resfría  fácilmente y a veces tiene unos cuantos días que parece que, sin tener fiebre, tenga la gripe con  dolores generales (brazos, espalda, piernas, cabeza, etc.) y cansancio extremo. Hace más de dos años que sus deposiciones  son variables y lleva un año que son blandas, incluso líquidas, pero no le ha dado mayor importancia y no lo ha comentado en casa ni con el médico (su madre tiene celiaquía). Cualquier esfuerzo, emoción o falta de sueño la agrava. Necesita  hacer la siesta para recuperar energía. De pequeña no fue una niña enfermiza, era muy activa, alegre. Pegó un gran estirón hacia los 14 años, antes de tener su primera regla. Recordando, parece que hace tres años, después de una gran decepción con una relación, empezaron los dolores de cabeza y  tuvo unas anginas muy fuertes que no mejoraban con los antibióticos a pesar de dosis altas y al final fue diagnosticada de Mononucleosis infecciosa, la “enfermedad del beso“. Le costó bastante recuperarse aunque le hicieron análisis y no tenia el hígado inflamado. Hace poco le  han hecho análisis de sangre que han sido normales incluyendo el estudio del tiroides. Le prescribo Phosphoricum acidum y propongo hacer estudio de celiaquía que es negativo.

 

Cuando hay factores en contra de la acción del medicamento homeopático

Con phophoricum acidum Miriam mejora parcialmente: no tiene dolores de cabeza y tiene más energía, pero las diarreas siguen .Así que le aconsejo que haga dieta sin gluten y tome probióticos porque sí que puede ser intolerante. A los tres meses vuelve a tener un cuadro gripal sin fiebre. Me dice que intentó hacer la dieta pero a la semana la dejó. Le explico que desde mi punto de vista el medicamento es correcto, pero tenemos un problema  del sistema inmunitario en el que están implicados dos factores que van en contra de la acción del medicamento homeopático clásico: las deposiciones, es decir, el intestino que dado el antecedente de la madre es muy posible que Miriam tenga  intolerancia al gluten  y el virus de la mononucleosis infecciosa (EBV), frente al cual posiblemente no desarrolló una buena inmunidad y pudo quedar “dormido”.

 

¿Qué es la enfermedad del beso o mononucleosis infecciosa?

Es una infección producida por el  virus de Epstein–Barr (EBV), virus de la familia de los Herpes, que está muy extendido en la población general  y se manifiesta por un cuadro de anginas con inflamación de ganglios en diferentes localizaciones y muchas veces con inflamación hepática. El EBV está relacionado con  enfermedades autoinmunes, donde el propio cuerpo rechaza partes del mismo (tiroiditis, artritis reumatoide, lupus, mielitis, esclerosis múltiple, diabetes juvenil…). También se relaciona con linfomas  y con diferentes tipos de cánceres. Este virus puede quedar latente y en situaciones de estrés de cualquier índole reactivarse manifestándose con cansancio y malestar general. Otras veces  no se llega a desarrollar una buena inmunidad frente el virus quedando en situación de cronicidad. Es muy interesante poder ver en qué situación está el paciente, ver qué soporte necesita para reequilibrar el sistema inmunitario (SI) y tratar las infecciones crónicas y/o latentes para recuperar  el estado de salud y evitar la progresión de la alteración del SI que pueda llevar en el futuro a situaciones mucho más complejas. Esto no se puede ver en los análisis convencionales sino que  se han de hacer estudios  muy específicos del sistema inmunitario. En éstos podremos  ver las deficiencias que hay y qué inmunidad se ha desarrollado frente el EBV. Así podremos aplicar un tratamiento específico homeopático con las sustancias que utilizamos en la regulación de nuestro SI y con las concentraciones que utiliza nuestro cuerpo, por lo cual no tendrá efectos secundarios. Son inmunomoduladores  homeopáticos específicos para cada situación. Este método diagnóstico y terapéutico es la  Bioinmunogenética. Miriam se hizo estos análisis y vimos que solo habían dificultades en la parte del SI que actúa frente a virus y que  había desarrollado defensas superficiales frente al EBV,  y que estaba en una reactivación del virus con un SI incapaz de controlar  la situación sin haber ningún otro problema añadido.

 

La importancia de la intolerancia al gluten

Por otra parte,  Miriam era reacia a hacer dieta sin gluten porque el estudio de celiaquía salió negativo, así que hicimos análisis del HLA, que es el polimorfismo genético, como nuestro DNI de la célula,  que nos dio la información que tenía varios genes de intolerancia al gluten. Esto confirmó que  el intestino estaba alterado. Hemos de tener en cuenta que el intestino es la superficie más extensa de nuestro cuerpo (si lo extendiéramos es como un campo de futbol) con la que establecemos relación con el exterior.  Imaginemos nuestra piel llena de heridas, pequeñas puertas de entrada a lo largo de todo el cuerpo. Todos entenderíamos que eso podría traernos problemas y sería mejor restablecer la piel. Bien pues, en el intestino además tenemos la mayor parte de  las células de defensa. Es fundamental restablecer el equilibrio de ese intestino que está permeable, que permite que pasen fácilmente tóxicos y gérmenes que someten al SI a una sobrecarga a la que no puede hacer frente correctamente. Además, en estas situaciones se produce una alteración de la flora intestinal, cuyo equilibrio es fundamental para nuestra salud .Así que Miriam, no solo  debía dejar el gluten, si no que debía hacer una limpieza de la flora para ir preparando el terreno, abonándolo  y sembrando una buena flora con prebióticos y probióticos. Miriam se mentalizó, hizo la dieta, los pre y probióticos y cuatro meses de  tratamiento  específico para el virus EBV y para mejorar la respuesta inmunitaria frente a los virus. A las cuatro semanas ya se sentía  fuerte, con energía, sin dolores y las deposiciones se normalizaron. A los dos meses se sentía muy bien, podía seguir el ritmo de sus compañeros. Finalmente, superó el curso y la selectividad. A los siete meses hicimos análisis de seguimiento en los que vimos que la respuesta inmunológica frente a los virus se había desbloqueado y que la inmunidad frente el EBV había mejorado mucho pero aún le faltaba ser más potente. Ella estaba bien, pero era necesario un refuerzo durante dos meses más. En el siguiente control todo estaba correcto.  

 

Conclusión

A veces tenemos factores en contra de la acción de los medicamentos homeopáticos que están bien escogidos que hacen que no obtengamos los resultados que esperábamos. Debemos levantar esas barreras. Un intestino saludable es fundamental para tener un SI equilibrado y funcionalmente competente. Es frecuente que nos queden uno o varios virus dormidos después de pasarlos, generalmente de la familia de los herpes, que pueden alterar el equilibrio de nuestro SI llevándolo a situaciones de autoinmunidad muy a menudo, o a otras situaciones más complicadas. Es interesante  poder evitar o tratar estas situaciones con un tratamiento específico inmunomodulador homeopático que no da efectos secundarios. Este tratamiento  puede ir acompañado o no del medicamento homeopático clásico.

 

 

Eulalia Torrellas Font ,Médica homeópata.

Artículo publicado en la revista Integral en 2016.